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Una breve visita a la Casa de Duarte
Una breve visita a la Casa de Duarte
La casona con estilo colonial, esa en la que nos encontramos de cerca con la heroica y noble historia del Padre de la Patria dominicana, está inmersa en un proceso de hermoseamiento, con motivo de conmemorarse este año el bicentenario de su nacimiento.
EL MANIEL DE OCOA
Allí, donde por primera vez vio la luz del mundo un 26 de enero de 1813 el patricio Juan Pablo Duarte, se trabaja ahora en el saneamiento y curación de las maderas dañadas por la carcoma, en el embellecimiento de la pintura de las paredes, plafones de los techos, barniz de las pasamanería y otros detalles que harán de este hábitat que perteneciera a la familia Duarte y Díez un mejor referente histórico, especialmente para las nuevas generaciones.
A propósito de esta importante conmemoración en la que los dominicanos recordamos los ideales y manera en que el prócer Juan Pablo Duarte trazó las pautas para que hoy nuestra República Dominicana profese orgullosa libertad e independencia, entrevistamos al presidente del Instituto Duartiano, José Joaquín Pérez Saviñón en sus oficinas de la casa museo ubicada en la calle Isabel La Católica 308 en la Ciudad Colonial.
Llegamos puntuales a la hora acordada -10:30 de la mañana- sin embargo, no pudimos conversar con él de inmediato debido a las diversas solicitudes de personas que lo requieren en estos días, precisamente para tratar asuntos relacionados con los actos patrios que se estarán desarrollando en todo el país.
Cuando logramos sentarnos con él, tras otra petición de un señor de “cinco segundos”, vimos en José Joaquín Pérez Saviñón a un hombre totalmente convencido e inmerso en los ideales y forma de comportamiento del patricio Juan Pablo Duarte y Díez.
Tanta es la percepción de la personalidad heroíca que sigue y predica este hombre que es imposible no salir orgulloso de quien fuera nuestro patricio.
Remodelación de la Casa-Museo de Duarte. Cuando llegamos a la casa y nos encontramos con los trabajos y todo el mobiliario recogido, pese a que se acerca la celebración del natalicio del patricio, la primera pregunta fue qué pasaba con la histórica infraestructura.
Con un rostro aparentemente cansado por todo el trabajo que tiene pero con el carácter afable que le caracteriza, José Joaquín Saviñón nos contó que se trataba de un hermoseamiento a la casa-museo, pero conservando siempre la originalidad de ésta.
“Estamos tratando un poco las maderas, las cuales estaban dañadas por carcomas, retocando las paredes y la pintura, que por el paso del tiempo se nos estaban prácticamente cayendo”, nos dijo.
Todo permanecerá igual en cuanto a la estructura, pero con una nueva cara no sólo en la apariencia física, sino también en la digitalización de sus documentos, ya que parte de la remodelación incluye la tecnología de punta, a fin de que todo lo que tiene el Instituto Duartiano sea más atractivo para la juventud. Tendrán plasmas, proyectores de imágenes para hacer más dinámicas las historias sobre Duarte y su familia.
VIDEO: Cortesía Instituto Duartiano
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