Salto de Parra en Ocoa

Mucho se ha hablado del ecoturismo en Ocoa, pero poco se ha hecho, teniendo la provincia grandes riquezas naturales...

La Presa de Jiguey

La Presa de Jigüey está ubicado en la región sureste de la provincia San José de Ocoa, a tan solo 60 kilómetros de San Cristóbal...

Salto la Bocaina

Salto la Bocaina, San José de Ocoa. República Dominicana...

La Presa de Jiguey

La Presa de Jigüey está ubicado en la región sureste de la provincia San José de Ocoa, a tan solo 60 kilómetros de San Cristóbal...

Salto de Parra en Ocoa

Mucho se ha hablado del ecoturismo en Ocoa, pero poco se ha hecho, teniendo la provincia grandes riquezas naturales...

domingo, 10 de abril de 2011

FORO ABIERTO...LA HISTORIA DE SAN JOSE DE OCOA,,POR LIZETTE

Tema: La Historia de San Jose de Ocoa...
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Lizette
Historia
La primera referencia a la región es del Padre Las Casas al incluir al Maniey como una de las provincias taínas.[3] Anglería no menciona al Maniey pero sí hace referencia al antiguo lago que existió en Rancho Arriba,[4] lago (o lagos) que desaparecieron en tiempos modernos.

Al parecer, la población índigena en Maniey era muy pequeña y, al pasar el tiempo, todo el territorio fue quedando deshabitado, excepto por los monteros que hacían viajes cada cierto tiempo para capturar vacas y cerdos cimarrones.

Al aumentar en la isla el número de esclavos de origen africano, muchos de ellos se rebelaban y escapaban hacia lugares de difícil acceso. Uno de esos lugares fue Maniey, nombre modificado a Maniel y que empezaría a usarse para indicar un lugar donde había esclavos alzados y no como nombre de la región.

Alexis Read sugiere que el poblamiento de la zona se inició a principios del siglo XVII con el establecimiento del Maniel Viejo de Ocoa.[5] Este poblado duraría hasta 1666 ó 1667 debido a una epidemia de viruelas y sarampión que hizo estragos en la isla. También hubo una acción militar, dirigida por Juan Villalobos, que se internó en la zona para capturar a negros cimarrones.

El segundo asentamiento fue a principios de siglo XIX, posiblemente alrededor de 1802, y se conoce como el Maniel de los Lorenzos debido a que quienes lo fundaron todos tenían el apellido Lorenzo sin que fueran familia. Aunque hay varias hipótesis, no se sabe con certeza de donde provenían estas familias.

El Maniel de los Lorenzos se estableció en la comarca conocida como El Canal, al norte de la ciudad de San José de Ocoa.

Poco tiempo después de la fundación del Maniel de los Lorenzos, empezó la migración desde Baní, empujada por las invasiones haitianas. Estas personas que venían de Baní se instalaron en el sitio actual de la ciudad de San José de Ocoa.

Algunos historiadores ponen como fecha de fundación de la ciudad de San José de Ocoa el año 1805 y se explica con una leyenda. Andrés Pimentel, joven del poblado de Matanzas próximo a Baní, se vio precisado a raptar a su novia Lucía Tejeda ante la negativa de la familia Tejeda de consentir el noviazgo. La pareja se refugió en el Maniel y fueron seguidos por otros formando así el poblado inicial de San José de Ocoa.

Mientras ocurrían esos eventos, los monteros y cortadores de madera seguían con sus actividades de cacería y corte por toda la región, dejando recuerdos de sus visitas en la toponimia regional.

El 28 de diciembre de 1858, mediante Ley 567, el Presidente General Pedro Santana, crea la común de San José de Ocoa de la antigua provincia de Santo Domingo. El 2 de diciembre del mismo año es inaugurado formalmente el municipio, pero el ayuntamiento sólo comienza a funcionar ocho años después, en 1866.

En 1895 pasó a ser parte de la provincia de Azua. En 1932 fue creada la provincia Trujillo, hoy San Cristóbal, a la que fue adscrita San José de Ocoa. Esta decisión no fue ejecutada oficialmente, por lo que volvió a ser parte de Azua hasta 1944, cuando se incorpora a la recién creada provincia de Peravia. Finalmente, San José de Ocoa fue segregada de Peravia por la Ley 66-00 del 6 de septiembre de 2000 para formar una nueva provincia.

Rancho Arriba se origina por la costumbre de los monteros de hacer unas refugios simples (los "ranchos") donde pasaban las noches y las tempestades; luego algún montero trasladaba su familia a ese lugar y así se fue poblando la zona. Igualmente pasó en Nizao-Las Auyamas (específicamente Nizao), que tiempo atrás se llamaba Rancho Abajo.

Durante la Guerra de Independencia, San José de Ocoa tuve un papel muy importante, celebrándose en su territorio las batallas de El Memiso y de El Pinar, impidiendo que las tropas haitianas pudieran pasar.

También durante la Guerra de Restauración, San José de Ocoa fue teatro de actividades importantes ya que el control de la región implicaba que se controlara el paso de tropas del Cibao al Sur y lo contrario.

El primer templo católico de la región fue bendecido el día 21 de enero de 1855 en San José de Ocoa. Fue consagrado a San José y a la Vírgen de la Altagracia; esto explica las razones por las que las fiestas patronales son el día de la Altagracia pero la ciudad lleva el nombre de San José.

viernes, 8 de abril de 2011

PROVINCIA DE SAN JOSE DE OCOA

San José de Ocoa es una provincia situada en el sur de la República Dominicana, en las estribaciones de la Cordillera Central. Limita al norte con las provincias Monseñor Nouel y La Vega, al este con la provincia San Cristóbal, al sur con la provincia Peravia y al oeste con la provincia Azua. Su capital es la ciudad homónima.



Vista parcial, San José de Ocoa.

Fue creada 2000, aunque no entró en vigencia hasta 2001; antes de su creación, era un municipio de la provincia Peravia.

La primera referencia a la región es del Padre Las Casas al incluir al Maniey como una de las provincias taínas. Anglería no menciona al Maniey pero sí hace referencia al antiguo lago que existió en Rancho Arriba, lago (o lagos) que desaparecieron en tiempos modernos.

Al parecer, la población indígena en Maniey era muy pequeña y, al pasar el tiempo, todo el territorio fue quedando deshabitado, excepto por los monteros que hacían viajes cada cierto tiempo para capturar vacas y cerdos cimarrones.

Al aumentar en la isla el número de esclavos de origen africano, muchos de ellos se rebelaban y escapaban hacia lugares de difícil acceso. Uno de esos lugares fue Maniey, nombre modificado a Maniel y que empezaría a usarse para indicar un lugar donde había esclavos alzados y no como nombre de la región.

Alexis Read sugiere que el poblamiento de la zona se inició a principios del siglo XVII con el establecimiento del Maniel Viejo de Ocoa. Este poblado duraría hasta 1666 ó 1667 debido a una epidemia de viruelas y sarampión que hizo estragos en la isla. También hubo una acción militar, dirigida por Juan Villalobos, que se internó en la zona para capturar a negros cimarrones.

El segundo asentamiento fue a principios de siglo XIX, posiblemente alrededor de 1802, y se conoce como el Maniel de los Lorenzo debido a que quienes lo fundaron todos tenían el apellido Lorenzo sin que fueran familia. Aunque hay varias hipótesis, no se sabe con certeza de donde provenían estas familias.

El Maniel de los Lorenzo se estableció en la comarca conocida como El Canal, al norte de la ciudad de San José de Ocoa.

Poco tiempo después de la fundación del Maniel de los Lorenzos, empezó la migración desde Baní, empujada por las invasiones haitianas. Estas personas que venían de Baní se instalaron en el sitio actual de la ciudad de San José de Ocoa.



Vista hacia algunos de los hermosos paisajes que muestran las montañas de San José de Ocoa.

Algunos historiadores ponen como fecha de fundación de la ciudad de San José de Ocoa el año 1805 y se explica con una leyenda. Andrés Pimentel, joven del poblado de Matanzas próximo a Baní, se vio precisado a raptar a su novia Lucía Tejeda ante la negativa de la familia Tejeda de consentir el noviazgo. La pareja se refugió en el Maniel y fueron seguidos por otros formando así el poblado inicial de San José de Ocoa.

Mientras ocurrían esos eventos, los monteros y cortadores de madera seguían con sus actividades de cacería y corte por toda la región, dejando recuerdos de sus visitas en la toponimia regional.

El 28 de diciembre de 1858, mediante Ley 567, el Presidente General Pedro Santana, crea la común de San José de Ocoa de la antigua provincia de Santo Domingo. El 2 de diciembre del mismo año es inaugurado formalmente el municipio, pero el ayuntamiento sólo comienza a funcionar ocho años después, en 1866.

En 1895 pasó a ser parte de la provincia de Azua. En 1932 fue creada la provincia Trujillo, hoy San Cristóbal, a la que fue adscrita San José de Ocoa. Esta decisión no fue ejecutada oficialmente, por lo que volvió a ser parte de Azua hasta 1944, cuando se incorpora a la recién creada provincia de Peravia. Finalmente, San José de Ocoa fue segregada de Peravia por la Ley 66-00 del 6 de septiembre de 2000 para formar una nueva provincia.

Rancho Arriba se origina por la costumbre de los monteros de hacer unas refugios simples (los “ranchos”) donde pasaban las noches y las tempestades; luego algún montero trasladaba su familia a ese lugar y así se fue poblando la zona. Igualmente pasó en Nizao-Las Auyamas (específicamente Nizao), que tiempo atrás se llamaba Rancho Abajo.

Durante la Guerra de Independencia, San José de Ocoa tuve un papel muy importante, celebrándose en su territorio las batallas de El Memiso y de El Pinar, impidiendo que las tropas haitianas pudieran pasar.

También durante la Guerra de Restauración, San José de Ocoa fue teatro de actividades importantes ya que el control de la región implicaba que se controlara el paso de tropas del Cibao al Sur y lo contrario.

El primer templo católico de la región fue bendecido el día 21 de enero de 1855 en San José de Ocoa. Fue consagrado a San José y a la Vírgen de la Altagracia; esto explica las razones por las que las fiestas patronales son el día de la Altagracia pero la ciudad lleva el nombre de San José.









C

Historia y Cultura De La Provincia de SAN JOSE DE OCOA....OTRA HISTORIA DE SU FUNDACION....

Historia y Cultura

Algunos autores como Fray Cipriano de Utrera, sitúan la fundación a mediados del Siglo XVIII (1750 - 1760). Investigaciones realizadas han demostrado que, tras la desocupación haitiana de 1802, un grupo de esclavos, temiendo por su vida al regreso de los blancos, huye hacia la Cordillera Central.

Tres de ellos, con sus familias, acampan en un lugar llamado El Canal, a unos cinco kilómetros de lo que hoy es el municipio de San José de Ocoa. Por coincidencia los tres respondían al apellido Lorenzo, por lo que su fundo dio en llamarse El Maniel de Los Lorenzos.

Tiempo después, caravanas de banilejos hacían recorridos de montería en los bosques de Maniel, ricos en reses y puercos cimarrones. Su presencia provocó el abandono del fundo por parte de Los Lorenzos. Para acampar durante sus incursiones, los monteros banilejos construyeron tres ranchos ubicados en Monte Higüero, La Vigia y Sabana Larga.

Los acontecimientos en la parte oriental de la isla provocaron la crisis de la economía hatera imperante en Santo Domingo, cuyo principal comprador había sido la antigua colonia francesa. Esto, unido a la quema de Baní ordenada por el presidente haitiano Jacques Dessalines en 1805, provocaría la emigración de algunos pobladores hacia El Maniel.

Un hito que marca los orígenes de San José de Ocoa es sin lugar a dudas la huída de los jóvenes banilejos Andrés Pimentel y Lucía Tejada, quienes ante la oposición de los padres de ella a sus amores, eligieron como lugar de refugio los bosques de El Maniel. Esto ocurría por el año de 1805. A Lucía y Andrés siguieron otras familias banilejas impulsadas por la difícil situación política y económica imperante en la isla. Para el año 1810 el poblado contaba ya con unos 10 caseríos.

Es muy poca la información de que se dispone sobre el núcleo inicial de cimarrones en lo que hoy es el poblado de San José de Ocoa. Si se sabe que las sierras de El Maniel fueron durante mucho tiempo el principal abrigo de los esclavos que iniciaban una vida libre.

Como armas usaban flechas y espadas anchas y cortas que hacían con hierro y acero que compraban a los negros de la ciudad de Santo Domingo. Cultivaban la tierra, poseían carne en abundancia, recogían en los ríos tomines de oro con los que compraban ropa, bebida y otros implementos. Algunos eran católicos. Ponían cruces en sus casas y rezaban el Padre Nuestro y el Ave María, compartiendo estas prácticas con otras de carácter idolátrico.

El 28 de diciembre de 1858, mediante Ley 567, el Presidente General Pedro Santana, crea la común de San José de Ocoa. El 2 de diciembre del mismo año es inaugurado formalmente el municipio, pero el ayuntamiento sólo comienza a funcionar ocho años después, en 1866.

Por tierras ocoeñas pasaron héroes como el General Gregorio Luperón y Antonio Duvergé. También vivió allá el General de las Campañas Máximo Gómez, quien fue Secretario de la Oficina Civil y ocupó otros empleos públicos. El patriota Orlando Masara, convivió con los campesinos de Arroyo Bonito, La Horma, hasta el momento de su muerte.

Ocoa fue también escenario de combates durante la guerrilla de febrero de 1973, comandada por el Coronel de Abril, Francisco Alberto Caamaño Deñó, caído en Nizaíto después de cruentos combates con las fuerzas regulares. Son muchas las batallas que las comunidades de Ocoa han soportado en sus suelos, como Nizaíto, El Memiso, El Cercado, Los Quemados y La Mesa de Domingo. La presencia de Ocoa en acciones bélicas a lo largo de la historia ha estado determinada por su estratégica ubicación en el seno de la Cordillera Central.

San José de Ocoa ha dependido de diferentes provincias a lo largo de los años. En 1858 dependió directamente de la antigua Provincia de Santo Domingo; en 1895 pasó a ser parte de Azua de Compostela, en 1932 Trujillo creó la provincia de su nombre, hoy San Cristóbal, a la que fué adscrita San José de Ocoa, pero esta decisión no fue ejecutada oficialmente, por lo que volvió a ser parte de Azua hasta 1944. Al erigirse la provincia de Peravia, San José de Ocoa se incorpora a ésta por razones geográficas e históricas.

Durante mucho tiempo el ocoeño bailó y aún baila al ritmo de güira, tambora y acordeón, pero al paso del tiempo las cosas cambian. Era un baile compuesto por un bastonero, que era la persona que guardaba el sombrero de los bailadores; se usaba el "gabio" y el brindis, que consistía en un pedazo de yuca o de plátano con carne en una pulla de madera, que daba el parejo a su pareja como gratitud al bailar con ella. Además se ofrecía el refresco, la Malta Morena y la leche condensada.

Entre los ritmos musicales tradicionales cabe citar el merengue, el pambiche y el carabiné. Los campesinos de El Canal, en Ocoa, aportaron la "Maraca Ocoeña", consistente en un instrumento cilíndrico de madera con bolitas dentro y tapado por ambos lados, con clavos y atravesado por los medios. El sonido es similar al de las maracas tradicionales y combina armoniosamente con la güira.

Otra manifestación cultural ocoeña han sido las noches de vela y las salves. En las primeras se cantan salves y se hacen brindis con jengibre, pan, chocolate, café y mentas. Las salves son la misma cosa, pero duran sólo hasta la media noche. Estas fiestas se acompañan con la música y el baile de "Los Palos".

En algunas zonas del área rural, se usó durante algún tiempo el "Baquiní" consistente en cantos y décimas, en vez de gritos, ante la muerte de un niño. Otra manifestación muy extendida en Ocoa es la "Promesa al Santo", consistente en vestir al enfermo de blanco o de una tela especial llamada buenatuta, en cierto tiempo de caminar a pié, en llevar dinero o un miembro del cuerpo hecho en cera, o una piedra en la cabeza. Todo ello a cambio de un milagro de salud o de cambiar la situación económica.

En el aspecto gastronómico Ocoa tiene un plato típico llamado sancocho, consistente en habichuela verde con víveres blancos. Se usaba mucho en los convites para laborar la tierra o recoger el fruto. No cabe olvidar en el postre por excelencia de los ocoeños, saboreado por los nativos y los extranjeros: el dulce de higo.

Ocoa celebra sus fiestas patronales cada 21 de enero, en honor a la Virgen de la Altagracia.

Producción:

La agricultura es el sector dominante en la economía del municipio. Otras actividades económicas se reducen al comercio, pequeños talleres de ebanistería, mecánica y algunas procesadoras de productos agrícolas, como maní y café.

Las modalidades de tenencia de la tierra constituyen uno de los factores limitantes para el desarrollo del municipio. De acuerdo con el diagnóstico agropecuario de 1981, el municipio contaba con unas cinco mil fincas. Unas ocho mil familias vivían del sector agropecuario, pero 2,500 de ellas no tenían tierras propias y 1,800 disponían solamente de pequeñas fincas de hasta 2 hectáreas.

El 60% de las familias que viven del sector agropecuario sólo dispone del 2.5% de la tierra, mientras que el 2.5% de las familias que viven de la agricultura, posee, en régimen de latifundio, el 62.5% de la tierra.

En Ocoa se produce papas, habichuelas, maíz y yuca. Además guandules, cítricos, aguacate, café y guineo. Igualmente se produce leche y carne.

La población económicamente activa (PEA) de Ocoa, está constituída por 17,242 personas, de las cuales están trabajando 13,154 personas, o sea el 76% de la PEA. De las personas que se encuentran ocupadas, 1,438 son servidores públicos

Historia De San Jose De Ocoa

La primera referencia a la región es del Padre Las Casas al incluir al Maniey como una de las provincias taínas.[3] Anglería no menciona al Maniey pero sí hace referencia al antiguo lago que existió en Rancho Arriba,[4] lago (o lagos) que desaparecieron en tiempos modernos.

Al parecer, la población índigena en Maniey era muy pequeña y, al pasar el tiempo, todo el territorio fue quedando deshabitado, excepto por los monteros que hacían viajes cada cierto tiempo para capturar vacas y cerdos cimarrones.

Al aumentar en la isla el número de esclavos de origen africano, muchos de ellos se rebelaban y escapaban hacia lugares de difícil acceso. Uno de esos lugares fue Maniey, nombre modificado a Maniel y que empezaría a usarse para indicar un lugar donde había esclavos alzados y no como nombre de la región.

Alexis Read sugiere que el poblamiento de la zona se inició a principios del siglo XVII con el establecimiento del Maniel Viejo de Ocoa.[5] Este poblado duraría hasta 1666 ó 1667 debido a una epidemia de viruelas y sarampión que hizo estragos en la isla. También hubo una acción militar, dirigida por Juan Villalobos, que se internó en la zona para capturar a negros cimarrones.

El segundo asentamiento fue a principios de siglo XIX, posiblemente alrededor de 1802, y se conoce como el Maniel de los Lorenzos debido a que quienes lo fundaron todos tenían el apellido Lorenzo sin que fueran familia. Aunque hay varias hipótesis, no se sabe con certeza de donde provenían estas familias.

El Maniel de los Lorenzos se estableció en la comarca conocida como El Canal, al norte de la ciudad de San José de Ocoa.

Poco tiempo después de la fundación del Maniel de los Lorenzos, empezó la migración desde Baní, empujada por las invasiones haitianas. Estas personas que venían de Baní se instalaron en el sitio actual de la ciudad de San José de Ocoa.

Algunos historiadores ponen como fecha de fundación de la ciudad de San José de Ocoa el año 1805 y se explica con una leyenda. Andrés Pimentel, joven del poblado de Matanzas próximo a Baní, se vio precisado a raptar a su novia Lucía Tejeda ante la negativa de la familia Tejeda de consentir el noviazgo. La pareja se refugió en el Maniel y fueron seguidos por otros formando así el poblado inicial de San José de Ocoa.

Mientras ocurrían esos eventos, los monteros y cortadores de madera seguían con sus actividades de cacería y corte por toda la región, dejando recuerdos de sus visitas en la toponimia regional.

El 28 de diciembre de 1858, mediante Ley 567, el Presidente General Pedro Santana, crea la común de San José de Ocoa de la antigua provincia de Santo Domingo. El 2 de diciembre del mismo año es inaugurado formalmente el municipio, pero el ayuntamiento sólo comienza a funcionar ocho años después, en 1866.

En 1895 pasó a ser parte de la provincia de Azua. En 1932 fue creada la provincia Trujillo, hoy San Cristóbal, a la que fue adscrita San José de Ocoa. Esta decisión no fue ejecutada oficialmente, por lo que volvió a ser parte de Azua hasta 1944, cuando se incorpora a la recién creada provincia de Peravia. Finalmente, San José de Ocoa fue segregada de Peravia por la Ley 66-00 del 6 de septiembre de 2000 para formar una nueva provincia.

Rancho Arriba se origina por la costumbre de los monteros de hacer unas refugios simples (los “ranchos”) donde pasaban las noches y las tempestades; luego algún montero trasladaba su familia a ese lugar y así se fue poblando la zona. Igualmente pasó en Nizao-Las Auyamas (específicamente Nizao), que tiempo atrás se llamaba Rancho Abajo.

Durante la Guerra de Independencia, San José de Ocoa tuve un papel muy importante, celebrándose en su territorio las batallas de El Memiso y de El Pinar, impidiendo que las tropas haitianas pudieran pasar.

También durante la Guerra de Restauración, San José de Ocoa fue teatro de actividades importantes ya que el control de la región implicaba que se controlara el paso de tropas del Cibao al Sur y lo contrario.

El primer templo católico de la región fue bendecido el día 21 de enero de 1855 en San José de Ocoa. Fue consagrado a San José y a la Vírgen de la Altagracia; esto explica las razones por las que las fiestas patronales son el día de la Altagracia pero la ciudad lleva el nombre de San José.

BALNEARIO EL SALTO DE PARRA, EN LA PROVINCIA DE SAN JOSE DE OCOA




EL MANIEL DE OCOA 

martes, 5 de abril de 2011

Caminata por la Salud en Ocoa

JUNTOS.....TRANSFORMEMOS A LA PROVINCIA DE SAN JOSE DE OCOA....


Yo voy a transformar a Ocoa...
Escrito por Redacción   
Lunes, 04 de Abril de 2011 11:02
Por Ulises Alcántara
Al leer el título de este artículo imagino que algunos de inmediato inferirán que "se lanzó el muchacho"… "comenzó a hacer campaña temprano"… otros, menos comedidos de pensamiento podrían pensar ¨ya comenzó a loquear el chamaco¨, o ¨se soltó Teodoro!¨ pensaría uno que otro lector influenciado por los ritmos predominantes en la histórica Barra América y lugares afines. Pero nada de lo precedente.
El título responde no a una afirmación personal, si no a una propuesta que le hago a cada funcionario público con autoridad y facilidades para contribuir de manera definitiva a sacarnos de la Edad Media. En verdad se trata de proponer a cada funcionario nuestro trazarse como meta, durante su gestión, ¨transformar a Ocoa¨. ¿Que un solo hombre o mujer no puede hacer esto? Bueno.. analicemos el asunto y sobre este particular regreso en el párrafo final de esta reflexión.

Verá usted… durante décadas, muchas décadas, se viene hablando sobre Ocoa y sus necesidades, y hemos asistido varias generaciones de ocoeños al espectáculo de los planes altisonantes, tal vez con buenas intenciones, pero que quedan plasmados en el papel como testimonio de lo bonito que escribimos. Pero nada mas. Si nos convertimos en detectives de intenciones encontraremos que desde hace mucho tiempo en Ocoa se vienen definiendo las cosas que ¨nos hacen falta para salir adelante¨, y que cada cierto tiempo estas cosas se definen, redefinen, ¨requetedefinen¨, se imprimen, se envían, se exponen y al final terminan en algún pestilente zafacón, haciendo tal vez compañía a inmundos desperdicios que nada tienen que ver con las sanas intenciones reflejadas en esos montones de palabras. Muy a pesar de eso, salvo honrosas excepciones, en conjunto no hemos sido receptores del beneficio de tan hermosos planes. Claro, repito, salvo excepciones… casos como el del Padre Luis, por ejemplo, han marcado el final de una época y el inicio de otra para muchas comunidades ocoeñas.

Pero hoy sabemos lo que necesita Ocoa. Ya sabemos que necesita empleos. Que la gente abriga la esperanza de que en Ocoa aparezcan fuentes de empleo que garanticen el sustento de muchos ocoeños, y que si ¨la cosa¨ no se les arregla terminarán comiéndose ¨los unos a los otros¨… Ya sabemos que Ocoa necesita que se desarrollen para beneficio popular todas las iniciativas industriales y empresariales que tengan cabida: agroindustria, ecoturismo, artesanía… usted diga y que se analice su viabilidad.

Ya sabemos que en Ocoa el tema de las carreteras y los caminos es impostergable. Sin carreteras se aleja la inversión, sin caminos transitables se embroman los productores agrícolas.. y tienen que repetir el rosario para que el Estado les ¨meta la mano¨ una y otra vez. Ya sabemos que debemos reforzar las opciones educativas. Sin ofensa para nadie, pero un pueblo solo se desarrolla fuerte, robusto, cuando la educación es prioridad. No basta con ¨bulto¨, tecnología barata ni estadísticas. Hemos dado muy buenos frutos pero proporcionalmete a la cantidad de habitantes las opciones son pocas, y de las pocas que tenemos algunas no representan la calidad requerida para un país competitivo.

Ya sabemos de instituciones símbolo de Ocoa que deben ser revisadas y convertidas en funcionales, pues se han tornado en parasitarias… sabemos que hay que combatir los ¨puntos de droga¨ con mayores opciones deportivas, de trabajo y educativas… Sabemos mas, mucho mas. Si rebuscamos en la vieja biblioteca de propuestas y tecnicismos encontraremos tanto… pero de poco ha servido.

Por eso creo que es tiempo de revolucionar el pensamiento y dejar de lado nuestra ¨zona de confort¨… pero sobre todo quienes tengan funciones públicas con autoridad y posibilidades. Hay que dar el salto y convertir cada municipio, a toda la provincia, en una nueva visión de progreso y desarrollo mas allá de las palabras. Esta es una invitación a cada autoridad que tenemos: senador, alcaldes, gobernador, diputados, regidores, directores y vocales de juntas… a proponerse como meta personal que durante su período de ejercicio va a ¨transformar a Ocoa¨. Es tiempo de que los ocoeños dejemos de vivir de la ilusión de que ¨algún día¨…

Y aquí, entre nosotros, si lo miran desde un punto de vista personal también es una buena oportunidad de crearse una gran imagen política y ser los ¨mayimbes¨ del pueblo. Este último lo agrego como razonamiento extra, para que sirva de ¨empujoncito¨ a cualquier funcionario que dude, por un momento, lo que significa la misión que queremos poner en sus manos ¨transformar a Ocoa¨.

Sabemos de antemano que un solo hombre o mujer no podría realizar tan importante hazaña… pero por sus investiduras es mucho lo que pueden hacer y serían la bujía inspiradora perfecta para cada ocoeño que cree en ese sueño, que cree que no es utopía, y sabe que Ocoa puede convertirse en una provincia de verdad… verdad.

EJEMPLO DE NOS MUEVE A REFLEXIONAR......


Juana Franco Mateo no falta a su compromiso con la escuela
Escrito por Redacción   
Martes, 05 de Abril de 2011 09:06
Cuando llueve, salgo de mi casa con dos pares de zapatos
Las Lagunetas, Ocoa.- Sonriente va la profesora Juana por el camino de Las Lagunetas. Salta piedras y levanta polvo en tiempos de seca, o bate fango y cruza las aguas elevadas de un riachuelo si los días son de lluvia.


Su cuerpo prominente hace que el motor “70” que usa para transportarse parezca un forzado juguete, cuando en realidad es el único medio que tiene para impartir dos tandas de clase en la escuela multigrado de esta rural y pobre comunidad de San José de Ocoa.

No necesita desmontarse del motor para que alguien salga a su encuentro. Niños y adultos la reconocen en la distancia, porque ven en su fi gura la fi gura de la escuela.

“Tenemos veinticuatro estudiantes, doce en la mañana y doce en la tarde. Solamente damos clase hasta el sexto grado. Cuando los muchachos llegan a ese nivel tienen que irse a la escuela de Arroyo Palma”, dice la profesora y directora de la escuela “Desiderio Andujar” con su voz suave y pausada.

El centro educativo sólo tiene un aula, donde niños y adolescentes de diferentes niveles reciben formación simultáneamente.

La distancia entre cada curso puede ser de uno o dos mosaicos del piso. Y los recursos materiales colindan entre el Texto Integrado del Ministerio de Educación y todo lo que la creatividad de la maestra pueda conseguir.

Las computadoras, radios, videos y demás herramientas tecnológicas recomendadas en los nuevos manuales sólo son instrucciones en papel.

Las condiciones materiales de las familias de Las Lagunetas apenas permiten la subsistencia. Por esta parte del planeta las palabras Internet, computadora, globalización y video conferencia resultan exóticas, aunque se sean empleadas con toda naturalidad entre los libros.

En la escuela tampoco hay espacio de recreación deportiva, ni cocina para preparar el desayuno escolar, cuyas raciones suelen ser menores que la cantidad de bocas infantiles.

Por falta de espacio, los alimentos se preparan en la ofi cina de la Dirección.

Acompañante Juana Franco Mateo está atenta a cada uno de sus alumnos. Conoce a sus padres y los mantiene al tanto de los avances y retrocesos experimentados.

Las limitaciones de recursos observadas en su escuela no borran su sonrisa. Hace ochos años comenzó a trabajar en esta comunidad. Y ya es una experta en superar los obstáculos del camino.

“Cuando llueve, salgo de mi casa con dos pares de zapatos: uno para correr el motor, y otro para entrar a la escuela”, cuenta la maestra Juana sin asumir postura, como si la peligrosa odisea fuera una broma. A su lado alguien dice que, a pesar de la lluvia o el polvo, la profe siempre mantiene la escuelita limpia, como un percal. La afi rmación se valida con un mirada de reconocimiento por el aula-escuela. Se ve limpia y ordenada, como un percal.

Por impartir docencia en a sus veinticuatro estudiantes, distribuidos en dos tandas, y por ser la directora del multigrado, Franco Mateo recibe un salario nominal de RD$22 mil, que con los descuentos de seguridad social, y el pago de un préstamo de vivienda quedan en unos RD$9,000.

La maestra dedica este ingreso a la manutención de su familia, y al consumo de combustible del motor que la lleva y la trae por el camino de Las Lagunetas.

Jhonatan Liriano
Listin Diario

domingo, 28 de noviembre de 2010

EL MANIEL DE OCOA

EL MANIEL DE OCOA

martes, 2 de noviembre de 2010

El Padre Quinn [pt. 1]

San José de Ocoa I HPujols

PUEBLO MIO, FERNANDO VILLALONA, MIS PREFERIDAS OCOA62.wmv

MI TIERRA, EL JEFFREY, MIS PREFERIDAS OCOA62

SECTOR BRISAS DEL NORTE DE GUARICANO

domingo, 5 de septiembre de 2010

BENDITA TU LUZ,MANA Y JUAN LUIS GUERRA, MIS PREFERIDAS OCOA62

BENDITA TU LUZ,MANA Y JUAN LUIS GUERRA, MIS PREFERIDAS OCOA62

sábado, 4 de septiembre de 2010